Tras vivir casi seis años en EE.UU, acabo de regresar a Brasil y estoy pasando por un momento de readaptación. Un ejemplo: cuando voy a bares y restaurantes, siempre se me olvida pedir agua. Es que en EE.UU, y otros países como Francia e Inglaterra, el agua de la llave es gratis, y la sirven sin pedirla.
¿Podríamos hacer lo mismo en Brasil? ¿Podríamos consumir el agua directamente de la llave? Según las empresas de agua y saneamiento de tres departamentos brasileños, São Paulo, Rio de Janeiro y el Distrito Federal (donde esta ubicada la capital Brasilia) si, el agua de la llave es adecuada para el consumo. De acuerdo con Sabesp, la compañía de agua de São Paulo, lo importante es estar seguro de que las instalaciones hidráulicas están limpias.
¿Pero qué opinas tu? La percepción de la calidad de los servicios es muy importante. He oído distintas respuestas de amigos brasileños que viven fuera. Hay los que jamás beberían agua de la llave, sea en Brasil o en otro país. Pero también hay los que no lo hacen en Inglaterra, pero lo harían en Brasil porque creen que el agua brasileña es de mejor calidad.
La percepción también es importante de un punto de vista económico, especialmente en el caso de las poblaciones de bajos ingresos. Un estudio hecho por el BID en 2011 demuestra que en México (con el record mundial en el consumo de agua embotellada, con un promedio per capita de 127 galones de agua al año), la gente mas pobre gasta hasta 10% de su ingreso en agua. Aunque gobierno del país haya invertido para mejorar la calidad de los servicios de agua, la gente sigue creyendo que el servicio es de baja calidad y compra agua, aun para bañarse.
No hay un estudio especifico en Brasil, pero es casi imposible visitar una gran ciudad brasileña sin notar las tiendas que venden agua. En São Bernardo do Campo, una municipalidad en las cercanías de São Paulo, el galón de 20 litros es vendido a 20 reais (cerca de US$10), un costo muy alto para los más necesitados.
Así que, volviendo a la pregunta inicial: ¿Beberías agua de la llave en bares y restaurantes? Y en tu casa, ¿lo harías?
*Ese post ha sido originalmente publicado en Ideacao, el blog del BID en portugués
Fuente: BID
