AGENCIAS.- Un ambicioso proyecto busca prevenir, mediante la ayuda de un robot especializado, que se pierda entre el 30 y el 50 por ciento del agua potable en Europa debido a fugas en las tuberías. La compañía noruega Breivoll Inspection Technologies ha desarrollado una forma avanzada de aplicar los ultrasonidos a tareas de detección.
En el marco de una colaboración con la SINTEF (Fundación para la Investigación Científica e Industrial); una organización noruega que es la mayor organización independiente de investigación en los países escandinavos), y otras entidades de dentro y fuera de Noruega, incluyendo la empresa Inventas, ha desarrollado una metodología de inspección para las redes de distribución de agua.
La pieza clave del nuevo método es un robot largo y con una forma que recuerda un poco a la de un torpedo, impulsado por una hélice, el cual es guiado a través de las tuberías de distribución del agua.
Está equipado con 64 grandes transductores de ultrasonido que transmiten y reciben señales ultrasónicas. Recoge datos que permiten a los técnicos calcular el grosor y los niveles de corrosión en las tuberías.
En 2013, la compañía se incorporó a un proyecto de la Unión Europea llamado TRACT, que incluye participación española. La meta del proyecto es desarrollar un robot de inspección para diferentes tipos de tuberías, con el objetivo de tomar mediciones sin tener que cortar el suministro de agua.
Las unidades de inspección que se usan en la actualidad son grandes y largas. El nuevo robot puede ser enviado a través de tuberías tan estrechas como de 10 centímetros de diámetro. También puede pasar por recodos con ángulos de hasta 90 grados.
Fuente: www.mundoaguaysaneamiento.net
