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Puerto Rico se queda sin dinero... y sin agua

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puerto-rico_mediaEl lunes incurrió en impago o default por primera vez en su historia. Además, se está quedando sin agua.

La sequía ha obligado al Gobierno de la isla a racionar el líquido. La situación es tan grave que el Gobierno está aplicando cortes de agua en las viviendas, a veces duran días. Las principales zonas turísticas, sin embargo, están exentas por el momento.

Es fácil atribuir el problema al clima caliente y seco, pero los puertorriqueños dicen que no es el único culpable. Ellos creen que el Gobierno ha gestionado mal los recursos hídricos y las tuberías de la isla durante años.

La casa de Juan Camacho tendrá agua corriente por un día y luego se le cortará por los siguientes dos días. Él vive en Trujillo Alto, una ciudad que se encuentra a sólo 21 kilómetros del centro de San Juan, la capital.

Cuando el agua vuelve, muchos puertorriqueños como Camacho dejan los grifos abiertos durante horas, llenando cubetas y recipientes con agua.

Las temperaturas en Trujillo Alto alcanzaron los 32 grados centígrados el lunes.

Camacho, un activista social, dice que el Gobierno ha descuidado la reserva local en su área, que ahora está contaminada, por lo que el agua no es potable.

"Tenemos un gran problema de sequía", dice Camacho, de 68 años. "Estamos ahorrando agua - no sólo para beber - para el baño y otras cosas fundamentales".

Ésta no es la primera vez que Puerto Rico sufre escasez de agua.

En 1994, la isla pasó por una crisis similar. En aquel tiempo los puertorriqueños almacenaban agua como lo hacen ahora. Los cubos de agua a la intemperie en un clima tropical cálido criaron mosquitos, lo que provocó un brote de dengue.

Maritza Stanchich lo recuerda bien. Se contagió de dengue en 1994, fue una de las peores experiencias de su vida. Y el racionamiento del agua que ha impuesto el Gobierno hoy hace que tema que pueda darse otra epidemia.

Stanchich, profesora de la Universidad de Puerto Rico, no se ve afectada por los racionamientos de agua porque su barrio en San Juan está en un lugar turístico. Sin embargo, ayuda a amigos afectados por los recortes del suministro. “Vienen a bañarse a casa,” dice.

Es otro problema importante en un verano de tristes noticias para Puerto Rico. Si le sumamos el impago, una economía fuera de control y la preocupación de que el Congreso estadounidense reduzca los fondos de Medicare en la isla, es fácil entender por qué los puertorriqueños están migrando en un éxodo masivo.

"Esta es una tormenta perfecta en el peor sentido de la palabra", dice Stanchich.

 

Por: Patrick Gillespie

Fuente:www.cnnexpansion.com