El aumento de la acidez de los océanos, una de las consecuencias directas del cambio climático, podría poner en peligro los ecosistemas marinos, especialmente a las almejas y los arrecifes de coral, durante miles de años y de forma irreversible. Así lo denuncian setenta academias científicas de todo el mundo en un comunicado hecho público este lunes coincidiendo con el inicio en Bonn de una nueva ronda de negociaciones sobre la lucha contra el cambio climático.