class="contentpane"> Crisis hídricas causan desestabilización social y económica en todo el mundo
Miércoles, 03 de Abril de 2019 10:02
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crisis hidrica01 1Según el Informe Global de Riesgos 2019, la crisis del agua está entre los 5 riesgos más importantes a escala mundial.

La escasez de agua en el mundo incrementa la problemática social y económica, para convertirse en un riesgo global latente para más de dos mil 100 millones de habitantes del planeta afectados por no tener acceso a agua potable. Por ello, las empresas deben incluir en sus objetivos de negocio un plan proactivo de contingencia y riesgo ante esta situación como una necesidad que aseguraría la sostenibilidad de las operaciones nacionales y globales.

“La carestía hídrica está posicionada entre los primeros lugares por su nivel de impacto a escala mundial”, según indica el Informe Global de Riesgos 2019 publicado por Marsh & McLennan Companies en colaboración con el Foro Económico Mundial.

“La generación de energía, la cadena de valor alimentaria, así como industrias relacionadas a la manufactura, vestido y agricultura son las principales perjudicadas ante la inminente crisis del agua. La operación de estos sectores se vería afectada incluso en su etapa más básica, lo que provocaría afectaciones a la salud, así como desestabilización social y económica en todos los niveles”, señala el análisis en un comunicado.

“Aún estamos a tiempo de neutralizar este impacto, pero se requiere sobre todo la ayuda de los gobiernos y las empresas. Estas últimas deben concientizar y crear planes proactivos para alentar hacia una cultura de prevención que contribuya a la continuidad de sus operaciones y mitigar la crisis del agua que se presentará en el mundo si no se ponen en práctica acciones”, comentó Gerardo Herrera Perdomo, Risk Consulting Latin America Managing director en Marsh & McLennan Companies.

Las interconexiones a raíz de esta crisis provocan migración forzada, crisis alimentarias, e incluso afectaciones a escala global como la propagación de enfermedades por carecer de recursos hídricos suficientes.

El aumento en el precio del agua también representa un riesgo de alta probabilidad a corto plazo, que marcará aún más la división entre regiones y sociedades, por lo que incluir dentro de las políticas corporativas y públicas acciones que generan un cambio positivo para el medio ambiente aportará a la estabilidad en general.

Un ejemplo de esto, es el de Ciudad del Cabo en África: En 2017 el gobierno anunció el “Día Cero”, avisando a sus ciudadanos que el 21 de abril de 2018 la ciudad se quedaría sin agua como consecuencia de las escasas lluvias en años y las sequías de la región. El anuncio provocó pánico, bajas en el turismo y disturbios sociales. Pero la campaña logró el ahorro de 600 millones de litros diarios en 2017 a 507 millones litros diarios a finales de abril de 2018; y se les limitó a un consumo diario de 50 litros por persona, que aún permanece vigente

“Las empresas y organizaciones deberán incluir procedimientos innovadores e implementar mejores prácticas, así como poner en marcha un plan de riesgos que mitigue cualquier situación cercana que ponga en riesgo su prevalencia”, finalizó Gerardo Herrera Perdomo, pues la demanda mundial de agua irá aumentando a un ritmo de alrededor del 1 por ciento anual, como ha ocurrido en las últimas décadas en función del aumento de la población, el factor económico y los cambios en los patrones de consumo.

Teorema Ambiental/Redacción

Fuente: Teorema Ambiental

Crisis hídricas causan desestabilización social y económica en todo el mundo

Miércoles, 03 de Abril de 2019 10:02
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crisis hidrica01 1Según el Informe Global de Riesgos 2019, la crisis del agua está entre los 5 riesgos más importantes a escala mundial.

La escasez de agua en el mundo incrementa la problemática social y económica, para convertirse en un riesgo global latente para más de dos mil 100 millones de habitantes del planeta afectados por no tener acceso a agua potable. Por ello, las empresas deben incluir en sus objetivos de negocio un plan proactivo de contingencia y riesgo ante esta situación como una necesidad que aseguraría la sostenibilidad de las operaciones nacionales y globales.

“La carestía hídrica está posicionada entre los primeros lugares por su nivel de impacto a escala mundial”, según indica el Informe Global de Riesgos 2019 publicado por Marsh & McLennan Companies en colaboración con el Foro Económico Mundial.

“La generación de energía, la cadena de valor alimentaria, así como industrias relacionadas a la manufactura, vestido y agricultura son las principales perjudicadas ante la inminente crisis del agua. La operación de estos sectores se vería afectada incluso en su etapa más básica, lo que provocaría afectaciones a la salud, así como desestabilización social y económica en todos los niveles”, señala el análisis en un comunicado.

“Aún estamos a tiempo de neutralizar este impacto, pero se requiere sobre todo la ayuda de los gobiernos y las empresas. Estas últimas deben concientizar y crear planes proactivos para alentar hacia una cultura de prevención que contribuya a la continuidad de sus operaciones y mitigar la crisis del agua que se presentará en el mundo si no se ponen en práctica acciones”, comentó Gerardo Herrera Perdomo, Risk Consulting Latin America Managing director en Marsh & McLennan Companies.

Las interconexiones a raíz de esta crisis provocan migración forzada, crisis alimentarias, e incluso afectaciones a escala global como la propagación de enfermedades por carecer de recursos hídricos suficientes.

El aumento en el precio del agua también representa un riesgo de alta probabilidad a corto plazo, que marcará aún más la división entre regiones y sociedades, por lo que incluir dentro de las políticas corporativas y públicas acciones que generan un cambio positivo para el medio ambiente aportará a la estabilidad en general.

Un ejemplo de esto, es el de Ciudad del Cabo en África: En 2017 el gobierno anunció el “Día Cero”, avisando a sus ciudadanos que el 21 de abril de 2018 la ciudad se quedaría sin agua como consecuencia de las escasas lluvias en años y las sequías de la región. El anuncio provocó pánico, bajas en el turismo y disturbios sociales. Pero la campaña logró el ahorro de 600 millones de litros diarios en 2017 a 507 millones litros diarios a finales de abril de 2018; y se les limitó a un consumo diario de 50 litros por persona, que aún permanece vigente

“Las empresas y organizaciones deberán incluir procedimientos innovadores e implementar mejores prácticas, así como poner en marcha un plan de riesgos que mitigue cualquier situación cercana que ponga en riesgo su prevalencia”, finalizó Gerardo Herrera Perdomo, pues la demanda mundial de agua irá aumentando a un ritmo de alrededor del 1 por ciento anual, como ha ocurrido en las últimas décadas en función del aumento de la población, el factor económico y los cambios en los patrones de consumo.

Teorema Ambiental/Redacción

Fuente: Teorema Ambiental